Donde antes regateaban los mayoristas, hoy compran los habitantes de Budapest rodeados de un ambiente de lo más chic. Esto es posible gracias a los expertos en equipamiento de tiendas de Wanzl. Gracias a un ingenioso concepto, se ha logrado transformar un recinto de 1700 m² en una llamativa zona comercial. Al mirar hacia arriba, el cliente descubre los impresionantes tubos de ventilación y el típico patrón de techo de hierro corrugado. Si nos detenemos a observar el aspecto general de este establecimiento cuyo tamaño ha sido deliberadamente reducido, encontramos elementos de diseño únicos y especialmente llamativos, como la disposición de las cuerdas sobre las botellas de vino.
El establecimiento da la bienvenida a sus clientes con mucha luz y amabilidad. Hay tubos LED extralargos a lo largo de todos los sistemas de estanterías wire tech 100 que albergan el surtido de ultramarinos. Tanto en la sección de fruta y verdura, como en la zona de caja, la iluminación se basa en grandes bombillas redondas. Los marcos de madera decorativos del techo causan una perfecta primera impresión.
Un gran marco de madera atrae la atención de los compradores hacia el BakeOff, que presenta los productos recién horneados de una manera apetitosa y llamativa. A pocos metros se exponen las salchichas, la carne y el queso. Los mostradores se sostienen entre sí de una forma extraordinaria. El exclusivo diseño en zigzag hace que se reflejen elementos del techo de yeso y de madera sobre los mostradores de manera alterna.
