La tienda tradicional en el centro de la encantadora localidad de Appenzell llama la atención inmediatamente con su típico estilo local. Los gabletes curvos o rotos
dan al edificio del siglo XVI un carácter extraordinario. Los grandes ventanales de la planta baja permiten apreciar de un primer vistazo
lo que nos espera en el interior de este establecimiento de moda de 130 m². Las superficies de venta, inspiradas por el encanto tradicional de la fachada, presentan un estiloso diseño.
Hay elementos de moda de estilo rural, trajes tradicionales y una amplia variedad de hermosos accesorios expuestos en diferentes muebles de roble. Las estanterías de alambre negro reposan directamente sobre los muebles de madera sin soportes de pie. La iluminación colgante sobre la zona de cajas, que consiste en cinco lámparas esféricas con tres cabezas de buey plateadas cada una aportan al espacio un atractivo especial.
Cada uno de los espacios de venta está amueblado individualmente y cuenta con numerosos detalles fascinantes. El parqué de roble abrillantado en combinación con el suelo de baldosa de arenisca crea un extraordinario ambiente de bienestar. Los portones dobles antiguos, las bonitas antigüedades o las sillas de cuero y los elementos decorativos alpinos favorecen la estética agradable del espacio. La cercanía al cliente, así como el asesoramiento personal, pueden integrarse con facilidad si el entorno es adecuado.