Las curvas, las curvaturas y las oscilaciones recorren el diseño de la tienda y crean un flujo dinámico. Dentro del establecimiento, los extensos techos planos y redondeados dividen los surtidos por secciones. Estas estructuras están iluminadas con tiras de LED azules curvadas por la parte inferior, mientras que los productos se presentan en estantes EuroShelf. A su vez, estos se colocan ligeramente desplazados, creando la ilusión de una curva. Se trata de una alternativa interesante a las soluciones lineales de equipamiento de tiendas.
Las llamativas tipografías en blanco y negro para las zonas de las tiendas en inglés y árabe permiten tanto a los locales como a los expatriados y turistas moverse fácilmente por la tienda. La clientela multinacional también tiene en cuenta la amplia gama internacional de productos de la que disponen. Los contrastes claros en el suelo favorecen una estructuración clara de la zona de ventas. Los azulejos, paredes y techos brillantes, pero de color suave, evitan robar protagonismo a los productos.