Cajeros automáticos

Una variante clásica en la oferta de Wanzl es la denominada Vending Unit. Se encuentra en aeropuertos y estaciones de tren. Después de insertar una moneda, los viajeros pueden retirar un carro de equipaje de la Vending Unit. De esta manera, el explotador tiene la posibilidad de controlar en todo momento las existencias de carros y de dinero. Así, la Vending Unit representa una solución segura y clara para el acceso óptimo de los viajeros a los carros de equipaje.

Los sistemas de Wanzl son líderes en el ámbito de los cajeros automáticos

Pero los cajeros automáticos de Wanzl también se utilizan en otros ámbitos: como sistemas automáticos de prepago permiten cargar tarjetas de socio o de empleado con dinero en metálico, como máquinas dispensadoras de tiques se encuentran en museos o estacionamientos, y funcionan de manera totalmente automática y sin necesidad de personal. Esto no solo simplifica los procesos: también los agiliza. Las tecnologías que representan la base para estos sistemas ofrecen numerosas posibilidades, desde la navegación a través de una pantalla táctil de PC de 15" hasta la función de pago totalmente automática. Los cajeros automáticos de pago posterior de Wanzl, que se instalan, por ejemplo, en piscinas, contienen cajas de monedas con una función de clasificación y pago con capacidad para un máximo de 2200 monedas.

También se ofrecen terminales para tarjetas de pago electrónico/crédito con teclado para PIN para el pago sin efectivo. Unos bloqueos múltiples especiales protegen los cajeros eficazmente contra el robo. Además, los cajeros automáticos de Wanzl se pueden personalizar individualmente por medio de un elemento superpuesto iluminado con el logotipo de la empresa. Todos los cajeros poseen una robusta carcasa de acero inoxidable, apropiada para el uso en el interior y en el exterior. Para la protección contra la humedad y el frío, Wanzl ofrece soluciones de techos especiales para los cajeros automáticos.

Gestión de efectivo inteligente con los cajeros automáticos Wanzl

Las ventajas de un cajero automático son obvias: las máquinas funcionan las 24 horas del día y asumen de manera fiable y segura unas tareas que deberían ser realizadas normalmente por personal, lo cual implicaría costes elevados. Naturalmente, incluso los modernos cajeros automáticos no pueden prescindir de manera duradera de un control. Sin embargo, este se realiza de forma centralizada a través de una interfaz LAN y el correspondiente software para terminales. Esto ofrece a los explotadores la posibilidad de controlar simultáneamente varios cajeros situados en diferentes lugares, lo cual representa una solución actual y efectiva y, finalmente, también orientada al cliente.